Escuela Santa Lucia
QUIÉNES SOMOS
La Escuela Sta Lucia pertenece a la Congregacion de las Hermanas del Monte Calvario. La ESL “es una sociedad civil, de derecho privado, sin ánimo de lucro, filantrópica y tiene como objetivo crear, congregar, dirigir, mantener obras dirigidas a la caridad, la promoción humana a la educación, la cultura a la evangelización y la asistencia a la comunidad”
NUESTRA HISTORIA
La razón de ser de la escuela santa Lucia
Origen y formación
De noble y rica familia, la hija de Giorgio Centurione, dux de la República de Génova en el bienio 1621-1622, recibió una educación religiosa. Los padres querían por su educación que le permitiera leer obras de la literatura y se le enseñara latín. Su madre murió pronto y su padre, según la costumbre de la época, la prometió en matrimonio a Gaspare Grimaldi Bracelli, único heredero de una familia rica y noble.1
Matrimonio
Virginia contrae matrimonio el 10 de diciembre de 1602, con Gaspar Grimaldi Bracelli. En 1606 el prometido de Virginia, Gaspar Bracelli, se puso muy enfermo de los pulmones y los médicos le recomendaron un clima más saludable; por lo que se trasladó a Alejandría, en casa de unos primos. Su esposo murió el 13 de junio, a los 24 años, dejándola viuda a los 20 años.2
Buscando la colaboración de la madre de Gaspare, Giorgio Centurione hizo de nuevo los planes de boda de su hija, impulsado por el deseo de convertirse en dux, pero Virginia se negó a las nuevas pretensiones de su padre.
Las actividades de asistencia
Virginia Centurione fundó algunas escuelas y colegios, y ayudó con recursos propios a algunas familias necesitadas para que sus hijos pudieran ir a la escuela.
Durante a guerra franco-piamontesa de 1625, entre la República de Génova y el ducado de Saboya, que fue respaldado por Francia, el desempleo y hambre llegó a la nación. Génova fue invadida por inmigrantes que buscaron refugio en la ciudad huyendo de los territorios ocupados. Virginia continuó comprometida con sus obras de caridad mediante la organización de la asistencia espiritual y material a los refugiados, e incluso de algunos prisioneros de guerra.2
En agosto de 1625 murió también la suegra, y en 1630 Virginia comenzó la actividad de la hospitalidad y asistencia de las niñas pobres. Al crecer el número de jóvenes que eran acogidas en su palacio, para las que en principio reservó el ático, tuvo que buscar un local más amplio. La duquesa Placida Spinola, de quien era muy amiga, le concedió prestado, luego en alquiler, el monasterio de Monte Calvario que había comprado a los frailes franciscanos.
El 14 de abril de 1631, salió de la casa de Via Lomellini y se mudó con las jóvenes al convento de Monte Calvario, al que más tarde llamó «Refugio del Monte Calvario». Cuando el convento de Monte Calvario se hizo insuficiente para muchas peticiones, Virginia fundó dos nuevas casas. En menos de tres años la obra contaba ya con tres casas y trescientas jóvenes.
Para hacer frente a las dificultades económicas recurrió a la familia, especialmente a su hermano Francesco, jefe del Ejército pontificio). Igualmente pidió ayuda a la “Oficina de los Pobres” y a otros benefactores, que veían en su obra una oportunidad para las jóvenes que no tenían las condiciones suficientes para salir adelante.
En la primera mitad del siglo XVII había en Génova diversas instituciones públicas de asistencia a la población, entre ellas la “Oficina de los pobres” y la “asociación de las “Ocho señoras de la misericordia”; este último se encontraba en un estado de descomposición, por lo que era casi imposible encontrar ocho personas dispuestas a hacerse cargo de los ocho distritos en que se dividía la ciudad. Virginia fue invitada a ser parte de ella y se le dio un barrio pobre en el que vivían más de seiscientas familias. Decidió reorganizar la distribución de ayuda de una manera que en realidad llegara a los pobres: preparó y expuso a la asociación un programa de asistencia. Además, fue capaz de comprometer a la nobleza genovesa para que le ofrecieran los medios necesarios para el programa e incluso su colaboración. De esa manera, surgió la asociación de las Cien Señoras de la Misericordia protectoras de los Pobres de Jesucristo, conocidas también como las Cien Señoras de la Caridad, que trabajaron junto con otros voluntarios en los distintos distritos de la ciudad. En 1634 Virginia escribió una regla para la nueva Congregación. A pesar de la efervescencia inicial, las congregación no duró mucho.2
Virginia se dedicó entonces a la reorganización del lazareto de Génova, utilizado fuera de los períodos de peste, para la atención de mujeres, niños, ancianos e inválidos. Obtuvo además que un porcentual del ingreso del lazareto, se dedicara a los trabajadores del mismo.
Misión
Educar a las personas con amor y excelencia, en línea con el carisma agustiniano, desde la Educación Infantil hasta la Escuela Secundaria, para continuar en el desarrollo de la autonomía moral, intelectual y espiritual, en la realización de su proyecto de vida y en la construcción de una sociedad más justa.
Visión
Ser un referente educativo con excelencia en la promoción de una educación integral.
Valores
Comunicación, diálogo, alegría, Enseñar con amor
Ética, respecto, trabajo en equipo